lunes, 27 de octubre de 2014

@TecniTipsGANB #157

VESDA-E Sistemas de Detección por Aspiración

VESDA-E es la próxima generación VESDA, con múltiples capacidades innovadoras que mejoran la experiencia en el uso del equipo:
*El VESDA Smoke +,  ofrece una mayor sensibilidad de hasta 15 veces mayor que el VESDA VLP, mejora en exclusión contra el polvo, duplica la vida útil manteniendo la sensibilidad , con hasta un 8% menos en consumo de energía por unidad en área.

Tecnología del futuro

*VESDA Flex, tendrá capacidad de expansión y programación para una máxima flexibilidad, usando la ampliación Hardware Stax por módulos que fácilmente se adaptan al detector VESDA-E para añadir capacidades adicionales, y también cuenta con la aplicación Xtralis Software Analytics que puede ser comprada, descargada y configurada a través de un sistema de gestión remota a través de internet.

*VESDA Analytics, aplica una capacidad adicional única, el cual, permite al sistema, proporcionar una respuesta y detección específica. Analytics está actualmente disponible para Diesel TraceTM, WireTrace y polvo TraceTM.

 VESDA MODELO ACTUAL: VLP 

               
NUEVA SERIE: VESDA-E



*VESDA Verify, proporciona un conocimiento de la situación para mejorar el tiempo de respuesta, la eficacia y la eficiencia mediante direccionamiento de posición para 120 áreas y perfecta integración con ADPRO SmokeTraceTM.

*VESDA Connect, permite la creación de redes flexibles y opciones de programación que reducen el mantenimiento y seguimiento de los costos hasta en un 50% a través de una amplia opciones de conectividad y herramientas de diagnóstico remoto incluyendo Ethernet, Wi-Fi, USB, VESDAnet.


*Funcionamiento.

El aire, es extraído continuamente de la zona protegida a través de la red de tuberías de muestreo de aire por el detector con un aspirador de alta eficiencia. El sistema de red de tuberías de muestreo de aire puede contener hasta cuatro tubos. El aire proveniente de cada tubo de muestreo pasa a través del sensor de flujo de aire, donde una muestra del aire se introduce en la  cámara de detección a través del módulo de muestreo de humo. Un filtro adicional proporciona aire limpio para proteger el lector dentro de la cámara de detección para que no se contamine.

*Xtralis Corporativo.

Xtralis es líder mundial y pionero en seguridad de la vida. Inventamos VESDA de alerta temprana en detección de humos por aspiración (ASD), N º 1 de la marca ASD del mundo. Los clientes de todo el mundo confían en VESDA por Xtralis. Los Sistemas VESDA ASD también se pueden equipar con módulos para detectar gases peligrosos”.


“VESDA-E es el Sistema ASD más avanzado, confiable y flexible que jamás se haya creado”

“Durante años, la gama VESDA de Detectores de Humo por Aspiración (DHA o ASD) ha sido reconocida como la mejor del mundo. La nueva gama VESDA-E, basada en el detector de humo VESDA Plus, ofrece un incremento muy importante en la sensibilidad de hasta 15 veces superior a los modelos anteriores. La detección VESDA permite la detección de la mayoría de los conatos de incendio diferenciando los más comunes mediante técnicas de análisis exclusivas, en particular WireTrace permite la detección específica de cables sobracargados a sensibilidad más alta sin falsas alarmas. Totalmente compatible con versiones anteriores y con VESDA Flex, actualizable in situ, el nuevo sistema VESDA-E reduce el coste total de propiedad del sistema”.





Mayor Información: http://xtralis.com/

lunes, 20 de octubre de 2014

@TecniTipsGANB #156

El Factor H
Por Nick Barilo, P.E.
En los próximos años, el hidrógeno se convertirá en una revolucionaria fuente de combustible , y ya se están realizando esfuerzos por abordar cuestiones de manejo y seguridad para una amplia gama de posibles usuarios.

Mientras el mundo busca identificar fuentes de energía alternativa, las celdas de combustible accionadas a hidrógeno ofrecen una amplia gama de beneficios para la seguridad medioambiental, económica y energética. Las celdas de combustible de hidrógeno tienen el potencial de reemplazar el motor de combustión interna y proporcionar energía en una amplia gama de aplicaciones portátiles y estáticas.

En los vehículos, por ejemplo, el hidrógeno tiene el potencial de revolucionar nuestras fuentes de combustible. Las celdas de combustible (una tecnología que puede convertir la energía química en un combustible, en este caso hidrógeno en electricidad) están listas para ingresar a la industria automotriz, en la que importantes fabricantes de automóviles planean crear vehículos con celdas de combustible y que estarían disponibles al público a comienzos de este año. Para apoyar la utilización de estos vehículos, se necesitarán estaciones de carga de combustible de hidrógeno, ya sea independientes o como parte de las instalaciones convencionales para la carga de combustible. Entre los primeros mercados que tomaron conciencia de los beneficios de las celdas de combustible se encuentran las operaciones de almacenamiento, en las que las celdas de combustible están actualmente reemplazando a los camiones industriales accionados por batería. Se anticipa que la comercialización de los vehículos de celdas de combustible para el consumidor a cargo de los fabricantes de automóviles más importantes se lanzará en California a principios de este año.

Los vehículos no son la única industria en la que el hidrógeno va ganando terreno; la lista de aplicaciones está creciendo a medida que diferentes sectores reconocen el valor y el beneficio de esta tecnología.

Estos usos incluyen instalaciones de telecomunicaciones, en las que las celdas de combustible entregan energía de reserva para las torres de celdas; edificios comerciales e industriales, en los que las celdas de combustible entregan energía primaria y de reserva; y en el transporte de bienes perecederos, en el que se están desarrollando equipos de refrigeración accionados por celdas de combustible como una alternativa a las unidades de energía auxiliar diesel tradicionales.

Hace tiempo que el hidrógeno es un ingrediente en muchos procesos industriales, y puede ser manejado y utilizado de forma segura con las prácticas adecuadas y las medidas de ingeniería correctas. No obstante, su utilización como combustible es aún relativamente nueva y por lo general los métodos adecuados para su manejo, almacenamiento, transporte y utilización no son enteramente comprendidos por parte de las diferentes comunidades que participan en su demostración y utilización o se ven afectadas por las mismas.

En condiciones atmosféricas, el hidrógeno es un gas inflamable, que se dispersa en el aire con rapidez y a través de materiales que normalmente no son considerados porosos. Cuando se mezcla con aire en concentraciones de 4 a 75 por ciento, forma una mezcla inflamable que requiere solo de una pequeña cantidad de energía para su ignición y que arde con una llama casi invisible de color azul pálido. Su inflamabilidad es en parte la razón por la que la utilización de hidrógeno con fines comerciales y públicos necesita del desarrollo, divulgación e implementación de normas y prácticas de seguridad del hidrógeno, entre ellas NFPA 2, Código de Tecnologías de Hidrógeno (nfpa.org/2), que se presentó en 2011.

El compromiso de NFPA es más profundo que la creación de una norma sobre hidrógeno. Con el fin de apoyar las cláusulas de NFPA 2, la Fundación de Investigación de Protección contra Incendios participó en una serie de trabajos con hidrógeno, que se encuentran disponibles en nfpa.org/foundation. Además, el proyecto sobre Capacitación en Seguridad de Vehículos Eléctricos de NFPA (evsafetytraining.org), un programa que ayuda a los bomberos y a otros socorristas a prepararse para la creciente cantidad de vehículos eléctricos, híbridos y vehículos para combustible alternativo en ruta, incluye una capacitación sobre la seguridad de las celdas de combustible de hidrógeno.

Elemento fundamental
El debate sobre la seguridad del hidrógeno no es nuevo. Para ayudar a desarrollar y expandir las prácticas de seguridad, el Panel de Seguridad del Hidrógeno se creó en 2003 para apoyar los esfuerzos del Departamento de Energía de los Estados Unidos de América para comercializar las tecnologías de celdas de combustible. El panel de 13 miembros comprende una diversidad de experiencia del sector comercial, industrial, gubernamental y académico. Busca identificar las brechas de los datos técnicos relacionados con la seguridad, las mejores prácticas, y las lecciones aprendidas para integrarlas a la planificación de seguridad en los proyectos de celdas de combustible e hidrógeno para asegurar que se aborden e incorporen las prácticas de seguridad correctas.

Las actividades relacionadas con el proyecto del panel incluyen la revisión del equipo y el diseño de las instalaciones, un análisis de las evaluaciones de riesgo y los planes de seguridad, y la conducción de revisiones de seguridad del lugar. Estas revisiones sobre la utilización de la tecnología del hidrógeno también apoyan los esfuerzos del panel para identificar las brechas en los datos técnicos relacionados con la seguridad, para el desarrollo de los códigos y normas, y para apoyar la expansión del conocimiento de seguridad.

El trabajo más reciente del panel se ha concentrado en los proyectos de demostración comercial para acelerar la comercialización y utilización de celdas de combustible. Estas tempranas implementaciones en el mercado incluyen el suministro de combustible a los vehículos, los equipos para el manejo del material, la energía de reserva para los depósitos y sitios de telecomunicaciones y los dispositivos de energía portátil. El trabajo del panel ha ayudado a identificar las brechas en el conocimiento que requieren de una consideración adicional, dos de ellas son la implementación de los códigos y normas en los cerramientos exteriores que contienen los equipos de hidrógeno y la necesidad de certificar los equipos.

El cumplimiento con los códigos y normas es esencial para garantizar la seguridad pública y la confianza en las empresas comerciales, en especial para aquellas que utilizan nuevas tecnologías. Con el aumento del interés en el hidrógeno como fuente de combustible, en el 2005 se le solicitó al Consejo de Normas de NFPA que elabore un documento que abarque y determine los requisitos para las tecnologías de hidrógeno. La primera edición de NFPA 2 se desarrolló principalmente a partir de los códigos y normas de NFPA existentes, incluidas NFPA 52, Sistemas de combustible gaseoso vehicular; NFPA 55, Gases comprimidos y líquidos criogénicos; y NFPA 853, Instalación de los sistemas de energía estacionarios de celdas de combustible. NFPA 2 fue elaborada para brindar un único recurso para apoyar el diseño y aprobación de los equipos e instalaciones de hidrógeno.

Un cambio significativo se produjo cuando la versión 2013 de NFPA 52 transfirió la responsabilidad de los requisitos para el suministro de combustible de los vehículos de hidrógeno al comité técnico de NFPA 2; al comenzar con la versión 2016, NFPA 2 será la única fuente para esta información. La importancia de NFPA 2 será posiblemente mayor ya que la aprobación de los cambios en la edición 2015 de NFPA 1, Código de Incendios, y el Código Internacional de Incendios harán referencia directa a NFPA 2 para los requisitos de las instalaciones de suministro de combustible de vehículos de hidrógeno. A medida con continuamos con el ciclo de revisión para la edición 2016 de NFPA 2, algunos de los temas centrales que aborda el comité técnico incluyen la determinación de los requisitos para los cerramientos de los equipos y los garajes de reparación y el perfeccionamiento de los requisitos para los sistemas de generación de hidrógeno y el suministro de combustible de los vehículos a gas.

Las observaciones de la revisión del Panel de Seguridad del Hidrógeno sobre las tempranas aplicaciones en el mercado revelaron los desafíos enfrentados al implementar los requisitos de NFPA a los sistemas de hidrógeno instalados en cerramientos exteriores. Los cerramientos varían en tamaño; pueden ser cajas pequeñas (6 a 16 pies cuadrados, con cilindros con una capacidad total de 1,000 a 8,000 pies cúbicos de hidrógeno) utilizadas para abastecer a los sistemas de energía estacionarios de celdas de combustible, o pueden ser contenedores plurimodales de gran tamaño (contenedores para envíos de 160 a 320 pies cuadrados) que albergan equipos de generación, compresión, almacenamiento y entrega con acceso del personal. Estos cerramientos podrían incluir espacios en los que una mezcla inflamable de hidrógeno y aire podría acumularse cerca de una fuente de ignición, creando el potencial para un incendio o explosión. Si el cerramiento es lo suficientemente grande como para que ingrese una persona y la ventilación es inadecuada, la concentración de hidrógeno podría presentar un riesgo de asfixia.

Exceptuando las estructuras tales como los contenedores plurimodales de gran tamaño que podrían ser consideradas edificios, no existe un conjunto consistente de requisitos que gobiernen la construcción de cerramientos, sistemas de ventilación, sistemas de detección de incendios o pérdidas, clasificación eléctrica, y distancias de separación entre el cerramiento y otras estructuras o equipos. Y aunque dichos contenedores de gran tamaño pueden ser considerados edificios por muchos funcionarios del código, las interpretaciones a cargo de los reguladores pueden variar ampliamente, generando una inconsistencia en la aplicación de normas. Sin requisitos claros para los diferentes tipos de cerramientos, los diseñadores cuentan con muy pocas pautas sobre cómo diseñar los sistemas de seguridad, y los funcionarios del código tienen dificultad para determinar qué requisitos del código pueden aplicar a qué cerramientos.

El desafío de la certificación
La certificación del equipo es otra necesidad identificada por el panel durante su revisión de los proyectos de utilización de celdas de combustible. La definición de certificación de NFPA incluye “un sistema por el cual una organización de certificación determina que un fabricante ha demostrado su capacidad para producir un producto que cumple con los requisitos de (una) norma(s) específica(s)”. Los códigos y normas entonces complementarán este tema con la utilización de términos relacionados “certificado, aprobado, listado, y etiquetado”. Cada término presenta expresamente un significado apenas diferente que se relaciona con algún nivel de cumplimiento formalizado por parte de un tercero o, en el caso del término “aprobado”, algo que se considera aceptable para la autoridad competente. Estos términos pueden aplicarse a los componentes individuales o, en líneas generales, a los sistemas o a un montaje completo.

Sin embargo, en este momento, el proceso de certificación sugerido por el panel presenta importantes desafíos. Lo que el panel considera “certificación” probablemente resulte confusa, con respecto a la terminología utilizada por NFPA en los diferentes códigos y normas. Podrían existir dificultades para aplicar las normas de certificación o incluso la ausencia de dichas normas, así como también una falta de organismos de certificación. El proceso de certificación para los productos que sufren cambios rápidos en concordancia con las tecnologías en desarrollo también puede presentar un costo prohibitivo, y existe además, una necesidad de aclarar qué es lo que cubre la certificación en relación a una pieza del equipo, sistema, montaje o instalaciones en particular.

Los miembros del panel también plantearon sus preocupaciones con respecto a la certificación por parte de terceros, ya que consideran que en el largo plazo, probablemente resulte crítica para el éxito de la comercialización de los sistemas de celdas de combustible de hidrógeno. Los miembros del panel han señalado que la escasez de una certificación por parte de terceros coloca una carga extraordinaria sobre los proveedores de celdas de combustible, para asegurar que sus productos incluyen las medidas de seguridad automáticas o inherentes correctas. Cuando se expanda más la utilización de celdas de combustible y procesos de certificación, será importante asegurar que la certificación del producto por parte de terceros o los programas de certificación aborden de forma adecuada estas cuestiones de seguridad, y que los proveedores de celdas de combustible reconozcan su responsabilidad.

También cabe destacar que cuando no se cuenta con equipos listados, los códigos y las normas por lo general exigen una “aprobación” de dicho equipo por parte de la autoridad competente. Esto carga a las autoridades competentes con una importante responsabilidad, ya que pueden no estar familiarizados con la tecnología, carecer de los recursos para apoyar una revisión minuciosa, o no ser conscientes de que su revisión y aprobación cubren equipos no listados. Por todas estas razones, el panel ha llegado a la conclusión de que debe buscarse de inmediato una certificación por parte de terceros para estos sistemas en este tipo de utilizaciones. Además, el panel planea elaborar pautas para los proyectos que no pueden utilizar equipos listados.

En el futuro posiblemente veremos cómo la utilización del hidrógeno como una fuente de energía, impactará en varias áreas de nuestras vidas, incluyendo los vehículos que manejamos, la manera en que se almacenan los bienes de consumo en depósitos y como se los introduce en el mercado, y qué tan importante es mantener los sistemas de emergencia y comunicaciones durante interrupciones de energía. La seguridad demostrada en la producción, distribución y utilización de hidrógeno será de suma importancia para una exitosa implementación de una infraestructura de hidrógeno y la utilización generalizada de la tecnología de hidrógeno.

Debido a que las tecnologías de hidrógeno comercial están solo emergiendo ahora, se intensifica la atención que se les presta debido a la falta de familiaridad pública con estos sistemas. La pérdida de la confianza pública en las primeras etapas de este desarrollo podría retrasar de forma significativa o incluso evitar un mayor progreso en una nueva tecnología como la del hidrógeno. Por estas razones, se colocará el énfasis en la educación de los socorristas, y el Panel de Seguridad del Hidrógeno continuará identificando las iniciativas para concentrar la atención, la acción y el alcance sobre las cuestiones clave de seguridad para la utilización de estos sistemas.

Nick Barilo, P.E., es gerente de proyectos en Pacific Northwest National Laboratory, lidera el Panel de Seguridad del Hidrógeno y es miembro del Comité Técnico sobre Tecnología del Hidrógeno para NFPA 2.


El ángulo del socorrista
Se debe contar con programas minuciosos, oportunos y flexibles para capacitar a los socorristas en la seguridad del hidrógeno.
A medida que se abordan las cuestiones de seguridad del hidrógeno, se están poniendo muchos esfuerzos también en la educación y capacitación de los socorristas en los riesgos y peligros asociados con el hidrógeno y las celdas de combustible accionadas a hidrógeno.

Los materiales de capacitación para los socorristas deben abordar la gama completa de riesgos asociados al hidrógeno, incluso las características directas de los riesgos tales como la inflamabilidad y las características indirectas de los riesgos, incluyendo los circuitos eléctricos cargados y los contenedores de almacenamiento de alta presión. Los programas de capacitación también deben perfeccionar una serie de enfoques utilizados para transferir conocimiento, desde capacitación a distancia hasta capacitación práctica. Y es de suma importancia que la información que reciben esté actualizada, sea precisa y técnicamente correcta.

Más adelante este año, NFPA lanzará un nuevo programa “Capacitación de bomberos para flotas, camiones y autobuses eléctricos, híbridos y accionados a celdas de combustible”, con el fin de educar a los bomberos sobre cómo responder a los incidentes que incluyen una amplia gama de vehículos eléctricos y de combustible alternativo. El proyecto, forma parte de la iniciativa de Capacitación de Seguridad de Vehículos Eléctricos de NFPA, está financiado por el Programa de subsidios para asistencia de los bomberos administrado por la Agencia Federal de Manejo de Emergencias.

Otros programas también han abordado la capacitación en las respuestas de emergencia de celdas y combustible y de hidrógeno, incluso la Capacitación en la respuesta de emergencia del hidrógeno para los socorristas del Departamento de Energía de los EE.UU. (tanto capacitación en línea como capacitación práctica), desarrollada y administrada por Pacific Northwest National Laboratory (PNNL), y un programa desarrollado para la Oficina del jefe de bomberos de California por la Asociación de celdas de combustible de California (CaFCP, California Fuel Cell Partnership). PNNL y CaFCP están trabajando para crear un depósito de información relacionada con el hidrógeno y las celdas de combustible que resulte preciso y actualizado para de esa manera evitar duplicar los esfuerzos entre los diferentes programas de capacitación de socorristas. NFPA planea utilizar esta información como parte de su nuevo programa de capacitación para bomberos. Esperamos que este enfoque ayude al gobierno y a los organismos privados a desarrollar programas de capacitación basados en un conjunto consistente de contenido y mensaje sobre el hidrógeno y las celdas de combustible.

Recursos para socorristas
evsafetytraining.org

Capacitación sobre vehículos eléctricos y accionados a combustible alternativo para socorristas

hydrogen.energy.gov/firstresponders.html
Introducción a la seguridad del hidrógeno para los socorristas

hydrogen.energy.gov/pdfs/review12/scs015_elmore_2012_o.pdf

Capacitación en respuesta de emergencia del hidrógeno para socorristas

cafcp.org
Información sobre la Asociación de celdas de combustible de California

nfpa.org/roadmap
“Reaching the U.S. Fire Service with Hydrogen Safety Information: A Roadmap” (Llegar a los cuerpos de bomberos estadounidenses con información de seguridad del hidrógeno: un mapa de ruta) es un informe elaborado por la Fundación de Investigación de Protección contra Incendios.





lunes, 13 de octubre de 2014

@TecniTipsGANB #155

Todo listo

Por Fred Durso, Jr.

Una nueva norma, NFPA 4, Prueba integrada de sistemas de protección contra incendios y de seguridad humana, presenta los protocolos que deben cumplirse en la prueba integrada de los sistemas de una amplia gama de edificios.

Está Paul Dunphy verdaderamente eufórico por la publicación de la norma más reciente de la NFPA? Les damos una pista: en las placas de las matrículas de Massachusetts de su Toyota Prius se lee: "NFPA 4".

Estaba previsto que el Consejo de Normas de la NFPA emitiera en abril la NFPA 4, Prueba integrada de sistemas de protección contra incendios y de seguridad humana, como un documento de consenso, pero Dunphy, inspector eléctrico y coordinador del área de cumplimiento de la Universidad de Harvard, ha estado abogando por una apropiada “integración de los sistemas” de seguridad humana y contra incendios durante años. Todos los proyectos de construcción de Harvard actualmente se someten a alguna forma de prueba integrada de los sistemas, lo que, como sucede con las disposiciones de la nueva norma, garantiza que los sistemas interconectados funcionen según lo previsto durante un incendio y otros incidentes críticos.

La experiencia de Dunphy sobre el tema lo llevó a formar parte del Comité Técnico sobre Comisionamiento y Pruebas Integradas, que elaboró la primera edición de NFPA 3, Práctica recomendada sobre comisionamiento y prueba integrada de los sistemas de protección contra incendios y de seguridad humana, emitida en 2012. Al ver la necesidad de normalizar la sección de la práctica recomendada sobre la prueba integrada de los sistemas, el comité ha quitado este material de NFPA 3 y lo ha utilizado como base para NFPA 4, un documento de cumplimiento obligatorio que puede aplicarse en edificios tanto nuevos como existentes.

“Espero ansioso el momento en que NFPA 4 salga a la calle”, dice Dunphy, y agrega que con estas placas personalizadas recibe reacción de otros conductores de automóviles. (Incluso un conductor se detuvo a su lado para decirle a voz en grito: “¡Eh, yo también soy miembro de NFPA!”). “Ese es el documento que quiero poner en las manos de las personas que supervisan los proyectos de construcción de Harvard”, expresa. “Saben que tengo a mi cargo el tema [de la prueba integrada de los sistemas] en la universidad y el documento será de gran utilidad”.

Dunphy sabe cuáles son las inquietudes para la seguridad contempladas por la prueba integrada de los sistemas y de qué modo estas inquietudes se extienden mucho más allá de las más de 300 instalaciones de Cambridge y Boston. Al requerir que se lleven a cabo las pruebas, NFPA 4 garantiza que los edificios con sistemas integrados e interconectados alarmas de incendio, sistemas de rociadores, sistemas de comunicación de emergencias, sistemas de ascensores, sistemas de energía de reserva, sistemas de presurización de escaleras y otros funcionen según lo previsto mediante protocolos de prueba, apropiada supervisión y documentos de verificación. Si bien ni NFPA 3 ni NFPA 4 especifican cuáles son los tipos de ocupación que requieren estas pruebas, han sido previstas para edificios más complejos que generalmente incluyen algunos o la totalidad de dichos sistemas, tales como hospitales, edificios de oficinas o edificios de altura ocupaciones que se beneficiarían con procedimientos de prueba de este tipo.

Como lo expresa uno de los miembros del comité de NFPA 4, la norma garantiza que los sistemas “sean capaces de un apretón de manos aceptable entre si”.

Uno para todos
Tan simple como pueda parecer realizar un intercambio de esta naturaleza, hasta el día de hoy, no han existido protocolos normalizados para la versión del procedimiento de NFPA 4.

Esos protocolos se inician con NFPA 3, centrados en el comisionamiento, definido como “un proceso sistemático que suministra confirmación documentada acerca de que los sistemas del edificio funcionan de acuerdo con los criterios previstos, establecidos en los documentos de un proyecto y satisfacen las necesidades operativas de los propietarios”. El proceso de comisionamiento abarca todas las etapas de un proyecto de construcción, desde el diseño hasta el producto terminado, incluida la elaboración de los planos conceptuales de un nuevo edificio y la instalación de sus sistemas de seguridad humana y contra incendios. La integración de los sistemas fue originalmente un componente de NFPA 3 después de que Dunphy urgiera al comité a que considerara su inclusión. Si se lleva a cabo de manera apropiada, la prueba integrada de los sistemas tiene lugar al final del proceso de comisionamiento, una vez que todos los sistemas han sido instalados.

NFPA 3 se ha convertido en la norma de oro en Harvard, según expresa Dunphy. Dice que el comisionamiento y los protocolos de la prueba integrada de los sistemas son la “norma aceptada” para los trabajos de construcción que se efectúan en la universidad. La planificación previa de la prueba integrada de los sistemas, por ejemplo, garantiza que todos los aspectos del proceso se desarrollen sin inconvenientes. Antes de la reciente prueba de los sistemas de un edificio de altura residencial, construido hace una década en Harvard, las reuniones de planificación congregaron a funcionarios de la facultad con expertos calificados en los sistemas individuales de un edificio. “Para los propietarios de edificios, contar con la presencia de estos expertos en la misma sala, debatiendo sobre los diversos sistemas para la seguridad y sobre cómo coordinar las pruebas puede ser una experiencia invalorable”, dice Dunphy. “Todas las partes se reúnen antes de la prueba, se efectúan las asignaciones y se elabora un plan para la prueba”.

Antes de que finalice este año, Harvard habrá completado las pruebas integradas de los sistemas en más de 20 edificios nuevos y existentes, incluida una reciente prueba llevada a cabo en un edificio académico de altura en el campus de la Facultad de Derecho de Harvard. El edificio incluye cuatro niveles de estacionamiento, situados debajo de la estructura y es además anexo a una antesala comedor.

Dunphy ha sido un firme defensor de la comprensión de la necesidad del proceso y de la normalización de sus diversos procedimientos. “Es fundamental que [la prueba integrada de los sistemas] tenga su propia norma”, sostiene Dunphy. “La prueba incluye componentes que son fundamentales para la seguridad humana”.

Además de quitar el capítulo de la prueba integrada de los sistemas de NFPA 3, la edición 2015 del documento, emitida también este año, se mantendrá en gran medida similar a su predecesor, dice el presidente del comité Maurice Pilette, presidente de Mechinal Designs, Ltd., empresa de consultoría en protección contra incendios. “El comité decidió mantener el comisionamiento, que es más semejante a la concepción de un proyecto, como una práctica recomendada y crear [otro documento] para la prueba integrada de los sistemas, de cumplimiento obligatorio”, expresa. “Los responsables del cumplimiento de los códigos y los propietarios de edificios pugnaban por esto con uñas y dientes. Es mucho el dinero que se gasta en edificios de altura, y los propietarios querían que algo estuviera en su lugar” que garantice que los sistemas funcionarán en conjunto, uno con el otro.

Partes responsables
La nueva NFPA 4 también trata un importante tema que no estaba contemplado en las normas para sistemas de edificios individuales. “Ninguna de las normas para sistemas requiere que dos sistemas se sometan a prueba en el mismo momento para garantizar su correcta interconexión”, dice Matt Klaus, ingeniero jefe en protección contra incendios de la NFPA y personal de enlace para NFPA 3 y NFPA 4. “Por ejemplo, NFPA 72®, Código Nacional de Alarmas de Incendio y Señalización, no incluye dentro de su alcance la prueba de los componentes hidráulicos del interruptor del caudal de agua de un sistema de rociadores. De manera que un contratista del sistema de alarma de incendio no puede asistir y comenzar a trabajar en contacto con este equipo para disparar el sistema cuando ello no está estipulado en su contrato. Lo único que pueden controlar son sus cables y equipos. De manera similar, el contratista del sistema de rociadores no es el responsable de garantizar que los aparatos de notificación del sistema de alarma de incendio se activen. Con la prueba integrada de los sistemas, llevada a cabo cuando finaliza un trabajo, los sistemas integrados serán sometidos a prueba juntos para garantizar que todo funciona en conjunto”.

Pueden surgir inconvenientes si estas pruebas no se llevan a cabo. Un sistema de alarma de incendio y un sistema de rociadores pueden funcionar de manera separada, pero sin una conexión adecuada con el relé, un componente del sistema de alarma podría no sonar si se activa el rociador durante una emergencia. “Existe la presunción de que estos sistemas son todos sometidos a prueba como una unidad, pero en general no es así”, sostiene Pilette. “No ha habido documentación en la industria [sobre estas pruebas], salvo que alguien las haya implementado voluntariamente. Ahora cuentan con una norma que todos pueden cumplir”.

NFPA 4 establece que el propietario del edificio o un “agente a cargo de la prueba integrada de los sistemas”, con conocimientos sobre los sistemas de seguridad humana y contra incendios de las instalaciones debería llevar a cabo la prueba. Si bien no se requiere que el agente a cargo de las pruebas tenga una certificación o matrícula específica, la persona debería tener un adecuado conocimiento de todos los sistemas instalados, dice Klaus.

Aunque la norma no establece un plazo específico para las pruebas periódicas integradas de los sistemas, NFPA 4 le asigna al agente la elaboración de un plan de pruebas que debería incluir los “requisitos de las pruebas posteriores a la ocupación”. Una evaluación de los riesgos determinará los potenciales modos de falla de un sistema y el agente asignará una frecuencia apropiada para las pruebas, en función de los resultados de este análisis. La norma también enumera una serie de factores desencadenantes que urgen a que se lleven a cabo estas pruebas, en particular después de haberse hecho alguna modificación o agregado en el sistema. “Inevitablemente, durante mis sesiones en el seminario sobre prueba integrada de los sistemas, algún administrador de edificios me interrogaba sobre la prueba de un edificio existente”, dice Dunphy. “Este es mi anzuelo para explicar la prueba retrointegrada de los sistemas. Les hago saber que esta prueba está disponible y que no es un proceso doloroso”.

Durante el año pasado, Dunphy ha dado unas seis charlas sobre el tema a las comunidades de la construcción y de la ingeniería, ansiosos por obtener más información. El Instituto Politécnico de Worcester ha solicitado la presencia de Dunphy y Pilette para darle a los estudiantes de postgrado de la carrera de ingeniería en protección contra incendios, una clase sobre comisionamiento y prueba integrada de los sistemas. Dunphy también ha presentado el tema a los inspectores de edificios de Cambridge y Boston. Se ha previsto la publicación de un manual de la NFPA para fines de este año, que describirá lineamientos adicionales sobre NFPA 3 y NFPA 4 e incluirá un suplemento en el que se destacan las exitosas experiencias de Dunphy en Harvard.

“Cada vez que hablo con un grupo sobre este tema, me piden que también se lo presente a otra agrupación”, comenta. “Aquí en el campus, esto es importante, dado que se están construyendo algunos edificios complejos y de grandes dimensiones. Me siento muy afortunado de que Harvard este asumiendo este compromiso”.


Fred Durso, Jr. es gerente de comunicaciones en NFPA. Puede seguirlo en Twitter en @FredDursoJr 


lunes, 6 de octubre de 2014

@TecniTipsGANB #154

¿Por qué preguntar por qué?
Por Lucian Deaton

Dando tratamiento a cuestiones relacionadas con el uso de determinadas tierras antes de que potenciales problemas se conviertan en problemas reales

Unos años atrás, visité varios departamentos de bomberos cerca de Albuquerque, Nuevo México, para hablarles sobre la preparación para incendios forestales. A lo largo de una carretera de dos carriles con vistas épicas que se perdían entre las montañas , vi un cartel que promocionaba un nuevo desarrollo inmobiliario en el que la casa de soñada por usted y que siempre deseó tener, podía ser suya a partir de U$250,000.

Estas tierras originalmente ganaderas, y que sin remordimiento estaban siendo transformadas en un nuevo desarrollo para viajeros y jubilados, creaba literalmente una interfaz urbano/forestal (WUI por sus siglas en inglés), en la que el ganado había previamente mantenido bajo el nivel de “combustible”. Si bien existen cualquier cantidad de herramientas regulatorias o disposiciones relativas a las diversas políticas sobre el uso de la tierra y que pueden ofrecerse como método para moldear tales emprendimientos, hay una pregunta importante que a menudo no se hace, y es la que me pregunté a mi mismo mientras manejaba por la carretera: ¿Por qué están construyendo aquí?

Recientemente, Headwater Economics, un grupo con influencia en políticas relativas al uso de la tierra, llevó a cabo una cumbre de expertos en incendios forestales para dar abordaje al tema de comunidades futuras ubicadas en lo que concluyeron es el 84 por ciento de la WUI que aún está por desarrollarse. Se ofreció una lista de soluciones regulatorias y de planificación que busca tanto enmarcar estos desarrollos con disposiciones regulatorias como influir en las decisiones de planificación. Un trabajo comparable se está llevando a cabo a través de la National Cohesive Wildfire Management Strategy, (Estrategia Nacional para la Gestión Cohesiva de Incendios Forestales) y también estamos viendo la promoción de mejores prácticas en jurisdicciones que han adoptado de manera exitosa ordenanzas y reglamentaciones de códigos.

Pero aún cuando esos esfuerzos ofrecen beneficios en términos de soluciones mediante reglamentaciones y políticas, a menudo y en primer lugar, se pierde la razón por la cual las comunidades en la WUI están desarrollando este tipo de proyecto potencialmente destructivo. ¿Cómo están influyendo los modelos de desarrollo económico, los requisitos bancarios para préstamos, las prácticas de construcción, los modelos impositivos locales, los esfuerzos de planificación global y la “demanda” del consumidor, en la decisión inicial de construir?

Mientras que se ofrecen soluciones, que requieren la adopción de reglamentaciones para estos desarrollos o que trasladan el verdadero costo de los incendios a las localidades, estas no abordan con el mismo entusiasmo las razones iniciales por las cuales las localidades se empecinan en hacerlo de todos modos. Sabemos a través del estudio elaborado en el año 2011 por la Fire Protection Research Foundation (Fundación para Investigaciones de Protección contra Incendios) “Dando abordaje al riesgo de incendios forestales en la comunidad: Revisión y evaluación de herramientas de reglamentación y planificación,” que las localidades tienen un enfoque “a-la-carta” en lo relativo a la adopción de reglamentaciones y herramientas de planificación que se adapta a las propias necesidades de protección contra incendios forestales.

No tiene por qué ser de esta manera. La reglamentación puede ser buena, y aquellos que se desempeñan en la esfera del gobierno, dispuestos a promulgar cambios positivos mediante una reglamentación establecida persuasivamente, a menudo están en lo correcto.

En tiempos pasados, hice una maestría en planificación urbana y recursos naturales. Me he dado cuenta que el mundo de la creación e investigación de políticas, es experto en refinar lo posible, pero también en ver sus soluciones dentro del vacío de su propio diseño. Ve lo que es mejor, pero puede olvidar lo que, en la práctica, impacta sobre la realidad, como ser —que un condado rural como Nuevo México y que finalmente puede saborear el desarrollo económico y el influjo demográfico, no está pensando en incendios forestales. El desafío para aquellos de nosotros que nos movemos en el ámbito de las políticas contra incendios forestales es el de alcanzarles soluciones a los planificadores urbanos, especialistas del desarrollo económico, y otras personas, antes de que los problemas potenciales se conviertan en problemas reales.

Es nuestra responsabilidad la de identificar y proponer lo que funciona para promulgar el cambio deseado en el proceso.

Pero también es necesario que consideremos qué es lo que está influyendo ese comportamiento local inicial mediante la jugada a largo plazo y nos preguntemos por qué las comunidades toman tales decisiones en primer lugar.

LUCIAN DEATON está a cargo de los Programas para Comunidades Firewise y para Comunidades Adaptadas a Incendios en la División de Operaciones de Incendios Forestales de la NFPA.